Recuerdo cuando niño, que la navidades era una época muy esperada y deseada por todos, sobre todo por los más peques y no solo por las vacaciones, que también. La familia se reunía al completo, unos años en casa de unos y otros años en la casa de otros, pero casi siempre en la vivienda que era más grande.
En mi caso, un tío mio tenia dos pisos en la misma planta y abrió una puerta para juntar ambas viviendas y era allí donde habitualmente nos reuníamos. Recuerdo aquellos momentos con mucha nostalgia. Actualmente, ni mi tío vive en mi ciudad, nos vemos muy de tarde en tarde, con mis primos no tengo relación hasta el punto que si me cruzase con mi prima mayor por la calle, no la conocería, creo. Muy triste.
Volviendo a aquellos años, están las típicas escenas que se quedan grabadas en la mente como fotografías impresas y nos las olvidas jamas. Eramos todos muy felices, nos podíamos juntar en torno a 20 o 30 personas. Espectacular. Además, por estas fechas recuerdo mucho a mi abuelo, que ya murió hará unos 20 años, pero siempre decíamos que estas Navidades serian las últimas, y no veas el hombre como aguantó, como un campeón. Luego estaba la Nochevieja que era muy similar a la Nochebuena, por ello es muy probable que no tenga recuerdos concretos de la última noche del año, siempre pensaría que seria Nochebuena.
De lo que si me acuerdo era de los Reyes Magos. De esa época si tengo recuerdos muy latentes, quizás de la misma forma que con las Navidades. Pero la ilusión que transmitíamos en Reyes es una cosa que nunca he querido perder. Me gusta transmitirla a los niños, pero no solo a ellos, a los adultos también. Es increíble ver como cuando ofreces un regalo de Reyes a un familiar se ilumina la cara, por que de una forma o de otra, le haces volver a su época de niño.
Si tuviera que destacar un momento de estos tres que he recordado, Nochebuena, Nochevieja o el día de los Reyes Magos, me quedo sin duda con estos últimos por que son los que nos hacen transportarnos al pasado y recordar aquellos días que te acostabas y al levantarte estaba el salón lleno de los juguetes que querías, que deseabas, los que habías pedido a los Reyes, que como todos sabemos, son los padres quienes los colocan, pero en realidad son los Reyes quien delegan en ellos para que se cumplan nuestras ilusiones.
FELIZ AÑO NUEVO
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